Nuestro setter Balthus lucha para seguir aquí desplegando su vitalidad.
Espero que la Leshmaniosis no acabe con él.
Es melancólico y cariñoso, pero en el campo es salvaje e incontenible.
Sigue la vida entrelazándose con la muerte, es nuestra propia naturaleza.
Y Dersu echa de menos a su compañero, y nos ha montado una escena indescriptible, increíble.
Los perros son así, nos dan lecciones, son ángeles que nos acompañan , mensajeros de un mundo mejor.
¡Ah! ¡Balthus!...
lunes, 18 de marzo de 2019
TIEMPO CIRCULAR
Se pinta para dar un rodeo al tiempo, se tensa el cuerpo en el deporte para que no nos abandone la juventud, se vive con intensidad como si no existiera la muerte.
Pero la verdad es que ya he barrido a la muerte varias veces con mi escoba, ya no es algo ajeno, ya no hay pánico, es parte de mi vida, es parte de mi muerte, vivo y muero entrelazadamente.
Quizá no exista el morir puesto que la vida es sueño.
Doblas una esquina y no conoces el paisaje nuevo que está por ver.
Lo que nos paraliza es el miedo.
La valentía es una virtud muy poco ensalzada.
El resucitado ya no tiene nada que perder, un nuevo día es un regalo.
Pero la verdad es que ya he barrido a la muerte varias veces con mi escoba, ya no es algo ajeno, ya no hay pánico, es parte de mi vida, es parte de mi muerte, vivo y muero entrelazadamente.
Quizá no exista el morir puesto que la vida es sueño.
Doblas una esquina y no conoces el paisaje nuevo que está por ver.
Lo que nos paraliza es el miedo.
La valentía es una virtud muy poco ensalzada.
El resucitado ya no tiene nada que perder, un nuevo día es un regalo.
domingo, 10 de marzo de 2019
THE LAST PICTURE SHOW
Veo " The Last Picture Show" de Peter Bogdanovich, y me llega la emoción de todos esas personas que buscan la felicidad sin dar con ella, todos se van aferrando a su salvavidas para no hundirse en ese mar sin orilla visible, ese mar que mata por agotamiento, sin necesidad siquiera de oleaje.
La soledad merodea en los interiores de las casas y sus habitaciones, en el cine viejo que va perdiendo espectadores, en los páramos desérticos, en las calles polvorientas, en las bellas mujeres que van envejeciendo y buscan brazos que les devuelvan pasión y juventud.
Dos hombres hablan en un lago, un pequeño oasis del desierto de Texas, Sam El León, un hombre maduro le habla al joven Sonny, le cuenta como cruzó ese lago a caballo con un antiguo amor, una mujer que le hizo conocer el lado salvaje de la vida, ella era capaz de llevarle más allá de lo conocido, más allá de si mismo, nunca más, nunca, había vuelto a sentir así: " Si la volviera a ver me volvería loco al segundo". Sam vive solo y regenta la sala de billar, el cine y el bar de la esquina.
Los hombres felices no hacen obras de arte, viven sin más.
Son los desheredados que viven en los márgenes, los que van dejando sus huellas de estupor, de desolación, los que dibujan la compasión, los que se estremecen con la vulnerabilidad de lo humano. Alguien nos dejó aquí tirados y buscamos sin descanso el paraíso.
Son los creadores los que expresando su finitud nos acercan a la belleza, a la emoción, al reconocimiento de la fragmentación, a la aspiración de lo total.
Ya no veo estas obras como algo lejano que viene de tierras extrañas, las siento como algo interno, como una cicatriz propia, un reuma que sobreviene ya conocido, es mi propia carne, mi propio corazón.
10 Marzo 2019
La soledad merodea en los interiores de las casas y sus habitaciones, en el cine viejo que va perdiendo espectadores, en los páramos desérticos, en las calles polvorientas, en las bellas mujeres que van envejeciendo y buscan brazos que les devuelvan pasión y juventud.
Dos hombres hablan en un lago, un pequeño oasis del desierto de Texas, Sam El León, un hombre maduro le habla al joven Sonny, le cuenta como cruzó ese lago a caballo con un antiguo amor, una mujer que le hizo conocer el lado salvaje de la vida, ella era capaz de llevarle más allá de lo conocido, más allá de si mismo, nunca más, nunca, había vuelto a sentir así: " Si la volviera a ver me volvería loco al segundo". Sam vive solo y regenta la sala de billar, el cine y el bar de la esquina.
Los hombres felices no hacen obras de arte, viven sin más.
Son los desheredados que viven en los márgenes, los que van dejando sus huellas de estupor, de desolación, los que dibujan la compasión, los que se estremecen con la vulnerabilidad de lo humano. Alguien nos dejó aquí tirados y buscamos sin descanso el paraíso.
Son los creadores los que expresando su finitud nos acercan a la belleza, a la emoción, al reconocimiento de la fragmentación, a la aspiración de lo total.
Ya no veo estas obras como algo lejano que viene de tierras extrañas, las siento como algo interno, como una cicatriz propia, un reuma que sobreviene ya conocido, es mi propia carne, mi propio corazón.
10 Marzo 2019
sábado, 2 de marzo de 2019
LA BONDAD
La bondad brilla en el anonimato, mejor si actúa sin pervertirse con el deseo de agradar o de recibir recompensa alguna: La bondad lleva en si misma su propio sentido.
Es la inteligencia suprema y la virtud más profunda.
Es una corriente que va ligando todas las cosas y eliminando las resistencias.
De vez en cuando nos llegan testimonios de una belleza sobrecogedora, son aquellos en los que la bondad elige morir antes que vivir en el sinsentido de la violencia.
Al fin y al cabo es mucho más importante cómo se vive que la misma vida.
Es la inteligencia suprema y la virtud más profunda.
Es una corriente que va ligando todas las cosas y eliminando las resistencias.
De vez en cuando nos llegan testimonios de una belleza sobrecogedora, son aquellos en los que la bondad elige morir antes que vivir en el sinsentido de la violencia.
Al fin y al cabo es mucho más importante cómo se vive que la misma vida.
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