Desde el cerro roto la voz sale sin lamentos, sin quejas, sin juicios. Es una exhalación incolora en la que está todo contenido, la sonrisa, el mutismo, el grito, la alegría, los pies no sienten ya ningún peso, no hay apegos, quiero decir que la vida y la muerte se abrazan, nada importa, ni siquiera esa palabra estigmatizada: es un salto hacia lo otro, ya no hay vértigo.
lunes, 4 de agosto de 2014
PEÑAS NEGRAS, CERROS ROTOS.
Desde el cerro roto la voz sale sin lamentos, sin quejas, sin juicios. Es una exhalación incolora en la que está todo contenido, la sonrisa, el mutismo, el grito, la alegría, los pies no sienten ya ningún peso, no hay apegos, quiero decir que la vida y la muerte se abrazan, nada importa, ni siquiera esa palabra estigmatizada: es un salto hacia lo otro, ya no hay vértigo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario